Nacido en 1961, pudiéramos describir a Juan Cristóbal en diferentes estápas de su vida y todas ellas acompañadas de su apodo que nace en los primeros años de su infancia.
Y así el Capi de los 60 como hijo y hermano, el de los 70 como estudiante y motorizado , el de los 80 como padre y amigo, el capi de los 90... y así pudiéramos proseguir, pero hay algo único que ha acompañado cada una de estas épocas, su lente, las imágenes que ha sabido captar en cada instante, la pasión por la fotografía y ese ángulo perfecto para inmortalizar cada momento, primero como diversión, luego como aficionado y posteriormente como profesional, sabiendo siempre actualizarse y adaptarse a las nuevas tendencias y tecnologías, pero sin perder lo más importante su esencia al captar el momento perfecto, esa imagen que de tan solo verla te traslada instantáneamente al momento captado. Aún recuerdo ese foto de aquella playa y su horizonte bajo un increible sol en su amanecer y eso es lo que debe hacer una foto, revivir la escena y el sentimiento de ese instante, esa es la magia de Capi, saber, a través de su lente, interpretar la emoción de sus clientes o el instante de un paisaje.